Una de las protagonistas femeninas de la inolvidable “Un día en Nueva York” (Stanley Donen y Gene Kelly, 1949). La prometedora carrera de esta actriz, cantante y bailarina nacida en 1919, se vio interrumpida cuando su nombre, junto con el de su marido, el también actor Larry Parks, entró en la vergonzante lista negra de Joseph McCarthy, por su pertenencia al Partido Comunista. Aparte de “Mi hermana Elena” (Richard Quine, 1955) y “The shadow on the window” (William Asher, 1957), el resto de su filmografía tuvo lugar en la televisión. A finales de la década pasada participó en dos minúsculas películas de terror.
Actor nacido en Chicago en 1935 y famoso principalmente por sus papeles para Mel Brooks. Fue el nazi Franz Liebkind en “Los productores” (1968) y el inspector Kemp en “El jovencito Frankenstein” (1974). Entre su vasta carrera sobresalen sus apariciones en “Locos de abril” (Stuart Rosenberg, 1969), “La noche se mueve” (Arthur Penn, 1975), “Fletch, el camaleón” (Michael Ritchie, 1985) o “Ilegalmente tuya” (Peter Bogdanovich, 1988). También fue muy activo en televisión y su voz se puede oír en infinidad de películas animadas.
Otro prolífico actor de carácter, nacido en Irlanda en 1929. Thomas Patrick McKenna trabajó tanto para teatro como para cine y televisión. Lo vimos en “El soñador rebelde” (Jack Cardiff, 1965), “Ulysses” (Joseph Strick, 1967), “Perros de paja” (Sam Peckinpah, 1971) –quizá su interpretación más recordada-, “El doctor y los diablos” (Freddie Francis, 1985) y “Valmont” (Milos Forman, 1989), entre otras.
El célebre productor al que, con la colaboración de Herschell Gordon Lewis, se debe el nacimiento del subgénero gore, con películas como “Blood feast” (1963), “2,000 maniacs” (1964) o “Color me blood red” (1965). Una vez rota su relación con Lewis, siguió produciendo delicatessen del tenor de “She freak” (Byron Mabe, 1967), “The acid eaters” (Byron Mabe, 1968), “The adult version of Jekyll & Hyde” (Lee Raymond, 1972) o “La loba de las SS” (Don Edmonds, 1975).
Nacida Maria Luisa Mangini, esta bella actriz italiana adoptó tan wildeano seudónimo sin saber que el personaje era masculino. Después de varios años en las tablas, debuta en el cine a principios de la década de los cincuenta. Trabaja para Federico Fellini en “Las noches de Cabiria” (1957) y para Michelangelo Antonioni en “El grito” (1957). También fue la mala mujer de “Totò, Peppino e… la malafemmina” (Camillo Mastrocinque, 1956), con la que obtuvo un gran éxito. Ganó un Nastro d’Argento por “Mogli pericolose” (Luigi Comencini, 1958). Una vez quedó embarazada, se retiró del cine. Desgraciadamente, la actriz se ha suicidado de un tiro.
Nos ha dejado también la tercera chacha del cine español, tras Rafaela Aparicio y Gracita Morales. Actriz extremeña nacida en 1926, ya en los años cuarenta actuaba para diferentes compañías teatrales. Debutó en el cine con “Pasaporte para un ángel” (Javier Setó, 1953). Con todo, no es hasta los sesenta que su nombre se hace popular para el público, con comedias como “Las amigas” (Pedro Lazaga, 1969), “El calzonazos” (Mariano Ozores, 1974), “El señor está servido” (Sinesio Isla, 1976), “El currante” (Mariano Ozores, 1983) y muchas otras. También encarnó otros registros en “Cria cuervos” (Carlos Saura, 1976), “Gusanos de seda” (Francisco Rodríguez, 1977) y “Miedo a salir de noche” (Eloy de la Iglesia, 1980), entre otras.
1 comentario:
...¡Florinda Chico...! Y yo sin enterarme...
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